Puede que sea su cumpleaños, pero eso no es excusa para no dedicarse un ratito a hacer las tareas, que además nos ha venido muy bien porque ya tenemos el nivel 10 de manitas. ¡Bieeen! Fabricaríamos el retrete, pero como ya encontramos uno anoche no nos hace falta. Así que solo nos queda deleitarnos con el nuevo look de Álex, puede que haya tenido la mala pata de tener la cara llena de granos, pero sigue siendo un bombón.
Llega la hora de comer y, como necesitamos un pastel y en casa no podemos hacerlo, nos vamos todos derechitos a Willow Creek, a una bolera restaurante muy modesta pero que para nuestro chico está muy bien.
Al parecer llegamos muy pronto porque todavía tienen la cocina cerrada. No hay problema. Nos entretendremos una ratito con los bolos; aunque eso nos va a costar algún que otro moratón. Uff. Es que son muy malos jugando. Tanto Diana como él. Uy. Que parece que ya se puede comer. Pues mejor dejamos esta tortura y pedimos una mesa, que con lo que tardan siempre en los restaurantes mejor darse prisa o acabaremos soplando las velas cuando ya sea viejo. (Por cierto, mirad que guapo está con su nuevo conjunto de formal/fiesta)
A ver, Diana, ¿vienes o no vienes? Uff... lo que me está costando que esta chica me haga caso, que se queda ahí enganchada a los bolos por muy mal que se le den. Pues nada, que al final pide nuestro chico por los dos. Un par de sodas que con el pastel ya nos llenaremos suficiente y no es plan de malgastar. Venga, va, ¿ahora sí? ¿Ya estas aquí?
Mejor soplamos las velas mientras esperamos que traigan las bebidas. ¿Pero a dónde vas? ¡Diana, no te vayas! ¿Pero te parece normal levantarte y largarte, dejándolo solo, mientras todo el mundo celebra su cumpleaños menos tú? No me parece nada bien lo que acabas de hacer. Anda, vuelve y al menos comed juntos.
Nosotras estamos un poco molestas por el desaire que le acaba de hacer Diana, pero él, en cambio, no deja de lanzarle piropos y piensa que igual es el momento de dar el siguiente paso en la relación. Entonces vemos a una vieja amiga que se ha parado justo en frente de nosotros, muy casual ella, nada más y nada menos que nuestra queridísima Katrina Caliente. Ostras, tenemos que acercarnos a saludar. Pero luego, que ahora estamos aquí muy bien con Diana y hay una proposición que hacer.
Aunque antes de la gran pregunta habrá que ponerse un poco románticos y darle ya de una vez un señor beso apasionado (sí, nunca se han dado uno). Vamos allá. Levántate y dale el beso. ¿Pero os besáis o no os besáis? A ver, juego, no me elimines la acción. Inténtalo otra vez, Álex. Dale el beso. ¿Otra vez? ¿Pero por qué pasáis de mi cara? ¡Diana, leñe, deja ya que te de un beso! Venga, un último intento y si no ya lo dejo. Pero... pero... ¡Que Diana se acaba de largar! Que Álex le iba a dar un beso y después de "rechazarlo" tres veces va y se larga, desaparece, así, sin más. ¡Cómo has podido hacernos esto!
El pobre está que no entiende lo que acaba de pasar. Nosotras tampoco. Pero no estamos dispuestas a dejar que su día especial termine así. No señor.
Por suerte tenemos cerca a nuestra vieja amiga que está más que encantada de pasar el resto de la tarde charlando y poniéndose al día con nuestro chico. Así sí. Esto es otra cosa.
Se hace tarde. Deberíamos despedirnos y coger el tren, aunque realmente no nos apetece volver a casa todavía. Entonces aquí nuestra amiga, que no tienen ningún interés oculto, nos habla de un modesto motel en Newcrest en el que podemos ir a pasar la noche.
Y para allá que van los dos.
Alex la invita a pasar. Se toman la última copita de la noche en la intimidad de la habitación y...
CONTINUARÁ...
Nooooo!!! No te creo!!!! 😱😱😱
Q termina en la cama con Katrina?! 😱
Mira... Muerta matá me dejas eeeh....
PD: Admiremos ese cambio de look de Alex... OMFG!! 😍